viernes, 13 de agosto de 2010

lunes, 17 de mayo de 2010

viernes, 14 de mayo de 2010

Elementos básicos que se comportan con las estructuras BCC, FCC, HCP


Platino

La minería del platino presenta dificultades extremas. La extracción, concentración y el refinado del metal requieren procesos de gran complejidad que pueden durar hasta seis meses. Se estima que de cara a producir una sola onza de platino, se deben procesar entre 7 y 12 toneladas de mineral.





















-Extracción
Normalmente la minería del platino se realiza bajo tierra, aunque también hay minería a cielo abierto. La etapa de extracción es intensiva en trabajo. Los mineros perforan agujeros con martillos neumáticos manuales y los explosionan. Más tarde, se recoge el mineral y se transporta a la superficie. Generalmente, los grados de BIC (medida del contenido de metales del grupo del platino en el mineral) están entre 4 y 7 gramos por tonelada.
Una vez en la superficie el mineral se machaca y pasa por el molino para obtener partículas rocosas más pequeñas y descubrir los minerales que contienen los metales del grupo del platino. En un proceso de "flotación de espuma", estas partículas se mezclan con agua y reagentes especiales. Cuando se bombea aire al líquido resultante se obtienen burbujas, a las que las partículas que contienen los metales del grupo del platino se adhieren, y flotan hacia la superficie. El concentrado de flotación se separa como una espuma jabonosa. En este momento, el contenido de metales del grupo del platino varía entre 100 y 1000 gramos por tonelada. El material que no ha flotado pasa por un segundo proceso de molino y flotación para poder obtener la mayor cantidad posible de metales de grupo del platino.

-Concentración
El concentrado de flotación, una vez seco, se funde en un horno eléctrico a temperaturas que pueden superar los 1500º C. Seguidamente, la pasta que contiene los metales de valor se separa de los minerales no deseados, que son desechados. Después se golpea la pasta periódicamente y se le sopla aire en los convertidores para separar el hierro y el azufre. El contenido de metales del grupo del platino de la pasta resultante de los convertidores es superior a 1400 gramos por tonelada.

-Refinado
En la refinería de metales de base se separan el níquel, el cobre y el cobalto de los metales del grupo del platino por medio de técnicas electrolíticas estándar. En el proceso se obtienen residuos en los que los metales del grupo del platino están muy concentrados. La última fase de la producción de platino requiere la separación y la purificación de los metales del grupo del platino, aparte del oro y de pequeñas cantidades de oro. Esta es la parte más difícil y minuciosa del proceso, en la que se combinan las técnicas de extracción de solvente, destilación e intercambio de iones. Finalmente, se obtienen los metales solubles, que se disuelven en ácido hidroclórico y gas clorino: primero se obtiene el oro y más tarde el paladio y el platino. Los metales insolubles son los últimos que se extraen.

-Reciclado
El platino se puede recuperar de gran diversidad de residuos después de su consumo. No hay ninguna técnica universalmente aplicable para reciclar y generalmente la técnica utilizada depende de la proporción de platino que haya en los residuos. La mayor parte del platino reciclado proviene del sector de catalizadores para automóviles. Normalmente, para fusionar el sustrato del catalizador y disolver los metales de grupo del platino, se funde a muy alta temperatura con hierro o cobre. De la aleación resultante se disuelven el cobre o el hierro y se extrae el concentrado de metales del grupo del platino, que se refina en un proceso similar al descrito anteriormente.